Los niveles de CO2 acumulados en la atmósfera al año 2022 son 50 veces más altos que los niveles registrados en la época preindustrial. Como consecuencia de ello, la temperatura media anual ascendió, en promedio, 1,1°C hasta la actualidad. En este sentido, las últimas estimaciones indican que, para finales de siglo, la temperatura media global habrá aumentado 2,7°C.
Las consecuencias del calentamiento global son diversas: sequías, altas temperaturas, baja humedad. Estos fenómenos meteorológicos elevan el riesgo de incendios forestales. El cambio climático seca la vegetación, haciendo que los paisajes sean más inflamables y aumentando la probabilidad de que se produzcan incendios.
Los cambios en las condiciones meteorológicas propicias a incendios se miden utilizando índices de pirometeorología, los cuales clasifican el nivel de riesgo de incendios forestales bajo un conjunto dado de condiciones atmosféricas. El último análisis llevado a cabo, en el marco del estudio “Global and Regional Trends and Drivers of Fire Under Climate Change”, da cuenta de que, en gran parte del mundo, las condiciones meteorológicas propicias a incendios aumentan a un ritmo superior al estimado por los modelos climáticos.
Los resultados indican que la duración de la temporada de incendios –periodo del año en que la mayoría de los incendios ocurren– aumentó significativamente en muchas regiones del mundo desde la década de 1980. La temporada de incendios se alargó un 27% a nivel mundial, con aumentos particularmente pronunciados en la cuenca mediterránea (55%), la Amazonía (94%), y los bosques occidentales de América del Norte (70%).
Asimismo, la cantidad de días con riesgo meteorológico de incendios extremos aumentó un 54% a nivel mundial, con aumentos particularmente pronunciados del 132% en la cuenca mediterránea y 166% en la Amazonía.
El estudio realizado pone de manifiesto qué la injerencia del cambio climático en el riesgo de incendios aumentará sustancialmente con cada grado que se incremente la temperatura media global. Por ende, no cumplir con el piso mínimo del Acuerdo de París, de mantener el aumento de la temperatura media global por debajo de los 2 °C, tiene un costo peligroso.
Las consecuencias de la crisis climática son cada vez más evidentes, frente a esta situación, la cual es de imposible resolución en el marco de un sistema capitalista, desde Ambiente en Lucha sostenemos ¡Socialismo o barbarie!