Escribe: Agustín Gigli
La patagonia andina estuvo estas últimas semanas en la prensa nacional y las redes sociales por la terrible represión y desalojo de la comunidad mapuche Lof Laufken Wuinkul Mapu. Desde el gobierno y la derecha se los acusa de usurpar territorios. Pero nada se dice de los verdaderos territorios usurpados, que se cuentan de a cientos de miles de hectáreas. Los grandes terratenientes, nacionales o extranjeros, se quedan con tierras para uso exclusivo de quienes tienen plata para pagar la expulsión de vecinos. Lewis en Lago Escondido, Benetton en Leleque, pero también el Ejército nacional, se quedan con miles y miles de hectáreas. Los trabajadores, cada vez, pueden acceder a menos espacios naturales.
Uno de los más grandes terratenientes en Patagonia es el Ejército argentino. En Esquel es uno de los “vecinos” que impide realizar loteos populares y de esa manera crece la especulación inmobiliaria y los terrenos se hacen casi imposible de acceder para la construcción de una vivienda.
Dentro de los campos del Ejército, se encuentra la laguna Willimanco (o Willmanco), reservorio de agua para la ciudad y, según el estudio de impacto ambiental, fuente del agua para el proyecto minero Suyai (cordón Esquel). A lo largo de los últimos años, la laguna se fue convirtiendo en un paseo natural próximo a la ciudad. Con una caminata de 1300 metros, se puede acceder a este espacio. Desde el centro de la ciudad se encuentra a 4 kilómetros. La propia municipalidad promociona su visita desde su proyecto “Recorré Esquel en zapatillas” de la Secretaría de Turismo (ver https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/recorre-esquel-en-zapatillas-sendero-laguna-willmanco-78717641).
Este espacio, de uso exclusivo del Ejército por años, se fue convirtiendo en un paseo habitual a consecuencia de un uso, al principio “clandestino” y luego, al masificarse, legalizado por el Ejército, solicitando el registro previo. Existe también otro acceso al espacio, a través de un recorrido mucho más extenso, por un campo de un privado, desde el cual se han realizado actividades como encuentros de kitesurf, pero vedado para uso individual.
Hace unos días se viralizó la nueva cartelería impulsada por el Municipio de Esquel (UCR-Cambiemos) donde se prohíbe la permanencia en la laguna. La excusa, es que estaría dentro del campo de entrenamiento del Ejército. Es un retroceso en las conquistas logradas para el uso y el disfrute de la naturaleza.
A consecuencia de todo esto, se comenzó a organizar una movilización hacia la laguna. La respuestas, casi obvia, burda, fue la prohibición de la entrada el día de la convocatoria (el domingo 30 a las 15 horas) por realizarse “ejercicios militares”. Desde Ambiente en Lucha e Izquierda Socialista de Esquel, adherimos a la convocatoria para lograr el acceso irrestricto de los espacios naturales que cada vez están más limitados. Lejos de ser los “mapuches” (como difunden los grandes medios de comunicación), son los terratenientes y el gobierno, en este caso a partir del ejército, los que limitan el derecho al uso común de estos espacios. Es necesario movilizarnos para lograr el acceso libre a las costas de lagos y ríos, y revertir el avance contra este derecho, como el que realizó el gobierno de Cristina kirchner en 2014 modificando el código civil.
Por el acceso libre a la laguna Willimanco, a la laguna Carao y demás espejos de agua. Convirtamos estos lugares en reservas naturales urbanas, como lo hicimos con la laguna La Zeta. Basta de terratenientes que impiden el acceso a la tierra tanto para el disfrute diario como para vivir. Vamos todos el domingo 30 a manifestarnos a la laguna Willimanco.