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La Libertad Avanza insiste con afirmar que el 56% de los argentinos votó a favor de este gobierno y que, por lo tanto, cuenta con el contundente apoyo de la mayoría. Pero, ¿esto es cierto?

El 56% es el resultado obtenido en el balotaje. Se trata de una instancia a cara o cruz, porque sólo hay dos opciones a elegir y, por lo tanto, es más una pulseada que una elección.

El verdadero porcentaje, desde el punto de vista del apoyo legítimo del pueblo, es el que Milei obtuvo primero en las PASO (agosto de 2023) y luego en las Generales (octubre de 2023). Es decir, un 30% sobre el total de los votos.

Es importante notar que el porcentaje se construye sobre la cantidad de votos emitidos y no sobre el total del padrón. El padrón electoral son todos los votantes habilitados para votar. En las PASO votó el 70% del padrón y en las generales el 77,7%.

Si tomamos en ambos casos el total del padrón, los votos a favor de Milei representan el 20,1% y el 22,3%, respectivamente. Es decir, no llega ni a un cuarto del electorado. Ni hablar si tomamos literalmente a “todos los argentinos”.

Por tener un porcentaje de legitimidad tan bajo es que está intentando obtener las facultades delegadas para gobernar por decreto. Simplemente no cuenta con el apoyo mayoritario de la ciudadanía. Eso se torna evidente en dos cosas: primero, en la cantidad de manifestaciones en contra que ya han tenido lugar en las calles desde que se conoció el paquete de medidas y, segundo, en la necesidad de establecer un protocolo represivo para criminalizar las protestas.

No hay autoconvocados libertarios en las calles apoyándolo, porque no son el 56% de nada.